Aquí la segunda entrada del fin de semana en Barcelona, que fue en parte más tranquilo y en parte un poco estresante puesto que a las 7 teníamos que estar en la estación.
Lo primero que fuimos nada más terminar de desayunar fue coger el autobús que nos llevaba al parque Güell, una vez allí y a pesar de que avisan de que puedes llevar el código QR en un móvil para validar la entada, error, no los leen; por suerte allí tienen conexión y pudimos enseñarle las entradas. Pero para casi nada, osea, la salamandra preciosa, las vistas preciosas, pero ya, no merece la pena gastarse los 8€ (7€ si la compras online) para ver lo que hay en el parque que además esta atestado de gente y no se pueden echar fotos tranquilo.
Después de eso nos separamos de nuevo y nos fuimos a comer tranquilamente hasta que... nos dimos cuenta de que en medio de media hora cerraba el Museo del Chocolate y no abrían por la tarde. Total, que después de correr no llegamos y nos quedamos sin verlo. Por suerte estábamos cerca del parque de la Ciudadela por lo que fuimos a verlo un poquito y luego ya pasamos a ver el Arco del Triunfo para allí también ya coger el metro.
Desde allí nos marchamos al Usagui café que es un sitio con repostería y bebidas típicas de japón, que teníamos muchas ganas de conocer y de sobretodo comer Melón Pan de verdad (el que pudimos comer recién hecho), además cogimos Macha Latte, Roll Cake de té verde y Melon soda con helado de Vainilla, todo riquísimo.Y por último antes de ir a coger el AVE nos dimos una vuelta más por la zona de la Catedral de Barcelona de nuevo.
Como ya dije, ha sido un viaje cortito en el que nos han faltado ver unas cuantas cosas pero en el que me lo he pasado genial y que no me importaría repetir, pero esta vez junto a mis amigas (¡a ver si el año que viene vamos!). Por último comentar que ¡Odio los trasbordo trampa de Barcelona y su manía de no tener escaleras mecánicas de bajada! ja, ja.
Saludos,
y gracias por los comentarios.
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